RELACIÓN DE LA VISIÓN Y EL EQUILIBRIO POSTURAL

Lic. Analia Carrion, Osteopata Lic. Carolina Pacheco, Especialista en Optometría comportamental

La VISIÓN, es mucho más que ver nítida una imagen, la visión nos permite dar significado a lo que vemos. Se puede definir la visión como el conjunto de habilidades del cerebro para identificar, interpretar y comprender lo que vemos. En esta tarea la visión integra información del sistema auditivo, propioceptivo, vestibular, equilibrio, gusto y olfato.

Por ello, muchas veces, problemas en ella manifiestan síntomas en otros sistemas o viceversa.

La visión depende del ojo y de las vías ópticas, también depende de su relación con el cráneo, la estática, la columna vertebral, las vísceras e incluso de las condiciones psíquicas de cada persona.

Los músculos del ojo, del cuello y todo el aparato muscular del cuerpo están en estrecha relación y, cada vez que los globos oculares se mueven, los músculos del ojo controlan, en parte, la tensión de los músculos nucales e indirectamente de los músculos paravertebrales.

Esto se produce a través del reflejo oculopostural y el reflejo nucal (reflejo oculo-cefalo-giria), que ocurren en las vías visoposturales.

Inversamente, se observan también alteraciones posturales que influyen en la agudeza visual.

El aumento del tono en los músculos del cuello y de la espalda producen cambios visuales. La mala postura prolongada implica cambios estructurales tanto al nivel general como visual.

Por otro lado, no hay que dejar de considerar la relación entre el ojo con la orbita y las meninges. Por lo que también explica la relación global del cuerpo humano. Entonces podemos decir que el ojo es el origen o causa de las alteraciones de la agudeza visual; pero se observa en la mayoría de los casos clínicos, que más bien es la víctima del conjunto de desequilibrios funcionales, orgánicos o estructurales.

Entonces, en la patología del ojo se deben considerar, las alteraciones metabólicas, por un lado, y las alteraciones mecánicas, que pueden modificar la propioceptividad, la hemodinámica, la vasomotricidad, la calidad de los tejidos y la forma y función de esta región del cuerpo.

Como conclusión, tanto los mecanismos posturales como los mecanismos visuales se influyen de manera recíproca, acorde a los conceptos osteopáticos.